Hablemos de dinero, hablemos de bitcoin.

Hemos tenido dinero por miles de años. Quizás cientos de miles de años, es difícil descifrar cuando apareció. Para muchos es el elemento que motiva al mundo, para otros es simplemente una herramienta que se usa para intercambiar bienes y servicios entre personas que no se conocen. Este ha tenido muchas formas, desde conchas de mar hasta números en una pantalla.

El dinero es una forma para transmitir valor entre personas, comunidades y países. Tiene un rol central en nuestra sociedad, economía y vida. Sin embargo, hemos llegado a tal nivel donde es de mal gusto hablar de dinero, llevándonos a nunca tocar el tema.

Siendo un ingrediente tan primordial para la civilización—y uno que no va a desaparecer—es curioso que no haya más conocimiento al respecto. ¿Alguien recuerda haber leído sobre el dinero en el colegio? Quién lo emite, cómo se emite, cuales han sido sus distintas formas,  sus propiedades y otros temas que vienen de la mano.

Siendo algo tan importante, me pareció pertinente hacer que la segunda edición se dedique al dinero.

En esta edición:

1. Las propiedades y características del dinero
2. Inflación 101
3. El dinero como sistema de control
4. ¿Cuál es tu ficción?
5. Una forma superior de dinero

Es importante comenzar haciendo una distinción entre dinero y divisa. Una divisa es simplemente una moneda extranjera; en Chile, el “dinero” que se usa, el peso, es en realidad una divisa. Lo mismo en Argentina, Estados Unidos, Europa y cientos más. Como veremos más abajo, el dinero debe cumplir con ciertas propiedades que las divisas nacionales no cumplen. Cuando se habla de dinero, apegándose a sus propiedades principales, solamente clasifican Bitcoin y los metales preciosos.

El dinero tiene una serie de propiedades y características. Las propiedades son sus funciones de uso, mientras que las características son anexas al dinero propiamente tal.

Sus tres propiedades son:

1. Medio de intercambio. El dinero debe servir como una herramienta para que yo pueda intercambiar bienes y servicios a través de él. Debe ser una forma de transmitir valor, sobre todo entre personas que no se conocen.
2. Unidad de cuentas. Se trata de una unidad numérica que sirve para expresar el valor de bienes, servicios, activos, transacciones e incluso el dinero mismo. Para dar algunos ejemplos, tenemos al dólar americano (USD), peso chileno (CLP) y Bitcoin (BTC) con sus distintas expresiones.
3. Reserva de valor. El dinero debe servir para guardar el valor. Esto quiere decir que lo que puedo comprar hoy con mi dinero debería poder comprarlo también mañana con la misma cantidad. Respecto a esta propiedad, anexo un link en que se observa el valor del USD en los últimos 100 años y su constante disminución de poder adquisitivo. Desde la creación de su banco central (la Federal Reserve) en 1913, el dólar americano ha perdido un 97% de su poder de compra. En el link se ve con ejemplos esta pérdida ¿Cumple entonces esta propiedad?

Sus cuatro características son:

1. Durabilidad. Implica que el aspecto físico del dinero (monedas y billetes) perdure en el tiempo y no se eche a perder. Para darles un ejemplo: el mismo oro que existía hace 5.000 años sigue dando vueltas hoy.
2. Divisibilidad. Significa que billetes y monedas (hoy en día números en una pantalla) son múltiplos de un valor, por lo que se puede subdividir para que su monto pueda acercarse mejor al de cualquier mercancía o activo.
3. Portabilidad. Que puedas llevar tu dinero a cualquier lado. Con la aparición del internet y la digitalización financiera, hoy puedes llevar tu dinero—en teoría—donde sea en el mundo.
4. Fungibilidad. En esencia, intercambiabilidad; significa que el dinero es lo mismo en cualquier lugar del mundo. El oro puro es exactamente lo mismo en Chile como en Egipto.

Estas son las propiedades y características básicas del dinero; más abajo se verán los distintos tipos de dinero y si cumplen con los requisitos necesarios.

Inflación

Ante la aparición del Covid-19, gobiernos alrededor del mundo (especialmente Estados Unidos y la Unión Europea) decidieron imprimir su moneda para impulsar la economía. Por lo mismo, la inflación ha tomado un lugar central en la conversación económica. ¿Qué es la inflación y cómo funciona?

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el Índice de Precios al Por Mayor (IPOM) son los mecanismos más comunes para medir la inflación. Mientras se discute generalmente a nivel de economía entera, a veces podemos ver inflación en algunos sectores (precios inmobiliarios) y deflación en otros (baja de precios de bienes).

En términos muy simples, la inflación ocurre cuando hay demasiado dinero persiguiendo muy pocos bienes y servicios. Llevándolo a un lenguaje más técnico, la inflación ocurre cuando el crecimiento de la oferta monetaria (impresión de moneda) sobrepasa el crecimiento económico. Para ilustrar la inflación, les escribo el siguiente cuento.

Existe una isla con 10 habitantes. En la isla, utilizan perlas poco comunes como dinero. Existen solamente 1.000 perlas en la isla. Los isleños usan estas perlas para construir hogares y comprar bienes y servicios. Los precios de los bienes son estables. Sin embargo, un Huracán (llamémoslo Mario) arrasa por la zona. Tras su paso, aparecen 1.000 perlas más. Ahora existen 2.000 unidades de “dinero” pero la misma cantidad de bienes. ¿Qué sucede? Existe un aumento del 100% en la oferta monetaria pero no hay un aumento en la producción económica. Ahora existe más dinero persiguiendo los mismos bienes, por lo que los productores de bienes suben sus precios. Oferta y demanda. Y así, vemos la inflación.

¿Por qué los bancos centrales del mundo tienen como meta mantener o aumentar la inflación? Al desincentivar el ahorro, la inflación incentiva el gasto—porque se castiga a quienes ahorran a través de la inflación—siendo que ante el aumento de precios de bienes, el poder adquisitivo de tu dinero disminuye. Los gobiernos y bancos centrales creen que el consumo impulsa el crecimiento.

Inflación → Consumo → Crecimiento.

Dada las reacciones de algunos países ante la pandemia, acecha el posible aumento de precios y disminución de poder adquisitivo de tu “dinero” (inflación). Por lo mismo, es importante protegerse con dinero que cumple con la tercera propiedad: reserva de valor. Esta es Bitcoin y metales preciosos, que la edición anterior componía la cuarta regla de finanzas básicas. Ahora pueden ver por qué esta regla existe.

Ésta es una explicación muy simplificada de la inflación.  Es un concepto con muchos matices y esta definición no pretende ser exhaustiva, sino dar una pequeña introducción al tema.

Ojalá que hayas aprendido y la próxima edición traerá otra.

Una nueva propiedad del dinero

Una vez más, Andreas nos viene a instruir con sus perspectivas originales. En este episodio habla sobre una cuarta propiedad del dinero: sistema de control. Se enfoca en como a partir de 1970, el presidente de los Estados Unidos, Richard Nixon, firma la Ley de Secretos Bancarios. Esta ley esencialmente convierte a instituciones financieras y bancos en policías de los gobiernos bajo el marco de “prevención de lavado de dinero”.

Que el dinero se convierta en un sistema control, explora Antonopoulos, socava las demás propiedades. ¿Cómo va a servir el dinero como medio de intercambio si te restringen con quien hacer transacciones? Es importante escucharla, porque da una visión distinta sobre la forma en que los bancos e instituciones financieras han excluido—y siguen excluyendo—a la mayoría de la población global.

Existen 4 billones de personas alrededor del mundo que no poseen cuentas bancarias. Bitcoin y la tecnología Blockchain son un sistema financiero alternativo basado en la inclusión y neutralidad. Como dice Andreas, tenemos dos formas de protesta: voz y salida. BTC entrega una salida al sistema financiero tradicional. Véanlo, es una visión diferente pero interesante y perspicaz.

¿Cuál es tu ficción?

El dinero es una ficción generalizada que hemos creado para poder intercambiar bienes y servicios sin necesidad de conflicto. Sin embargo, existen distintos tipos de ficciones al que uno se puede adherir y estamos ante un punto de inflexión para hacerlo:

Fiat. La moneda fiduciaria—Fiat—es la que reina en el mundo desde 1971, cuando el presidente Nixon elimina el último vestigio del patrón oro, dejando entonces que bancos y gobiernos creen sus propias monedas sin necesidad de un respaldo real (activos como el oro). Su respaldo resta en la confianza que tenemos en las instituciones que la emiten y controlan. Es un medio de intercambio obligatorio que por diseño pierde poder adquisitivo (valor).

Oro. Su interés deriva de su escasez y de que los humanos hemos sido cautivados por él desde hace miles de años. Ya no es un medio de intercambio—de uso diario—pero si guarda valor.

Bitcoin. Es un medio de intercambio voluntario que tiene valor porque es un código computacional abierto verificado por sus participantes, neutro y descentralizado, del cual solamente existirán 21 millones de unidades.

He creado la siguiente tabla para que veamos las tres “ficciones” y las distintas características que debería tener el dinero.

Una forma superior de dinero

Bitcoin apareció en el mundo hace ya casi 12 años y cada día aumenta su protagonismo en el mercado. Sigue siendo ridiculizado por algunos y un salvavidas para otros. Es, en efecto, la última abstracción del dinero y trae una serie de características nuevas que la hacen apetecible por un sinnúmero de razones.

Para situarte, Bitcoin es una forma de dinero electrónica persona a persona (peer to peer, en inglés) que se basa en un libro de cuentas abierto, verificado por todos los participantes de la red.

A continuación veamos las propiedades del dinero y si Bitcoin las cumple:

1. Medio de intercambio. Bitcoin es un medio de intercambio por excelencia ya que es un protocolo abierto, neutro y sin una autoridad central que la controla. Es una revolución, siendo que 4 billones de personas no tienen acceso al sistema financiero tradicional y Bitcoin les da una entrada. Cumple con la primera propiedad con creces.
2. Unidad de cuentas. Su expresión es BTC.
3. Reserva de valor. Existirán solamente 21 millones de Bitcoins en la historia. Así fue programado en su código y este no puede ser cambiado, lo que le da la escasez necesaria para que su valor se mantenga o crezca con el tiempo.

Ahora veamos las características:

1. Durabilidad. Bitcoin es un código computacional que nunca ha sido hackeado ni cambiado. Por lo mismo, es durable.
2. Divisibilidad. Cada Bitcoin se divide en 100 millones de partes. Esto se denomina como 1.00000000, haciéndolo divisible y muy útil para expresar incluso valores pequeños de bienes y servicios.
3. Portabilidad. Como es nativo al internet—no existe Bitcoin en forma física—y no depende de una autoridad central, es altamente portable.
4. Fungibilidad. Al ser una red abierta, verificada por sus usuarios, cada Bitcoin es el mismo en Chile como en Egipto.

Cabe notar además, que Bitcoin trae una serie de características adicionales, que lo hacen ser la mejor forma de dinero que hemos visto hasta el momento. Estas son propias de la tecnología Blockchain que es un protocolo inmutable, público, colaborativo, abierto, resistente a la censura y descentralizado. Todas ellas juntas hacen que estemos frente a una revolución monetaria, liderada por Bitcoin.